En general, las actividades agropecuarias se desarrollan en un ambiente
carente de información y pleno de incertidumbre; son inciertos los precios, el
clima, hasta las condiciones sociales y económicas del periodo de cosecha. Son
pocas las que están organizadas como empresas formales, y son menos las que
llevan sistemas de Contabilidad de Costos que les entreguen informaciones
validas y útiles para tomar decisiones. No
saben cómo afrontar preguntas como… A cuanto puedo vender por adelantado mi
futura cosecha? No tienen los datos que les permita hacer los cálculos, y
muchas veces las decisiones son tomadas sin base alguna.
La mayoría de las veces estas unidades no llevan cálculos de costos mas
allá que los egresos del bolsillo por falta de conciencia en su importancia, no
por falta de recursos. Los empresarios agrícolas tienden a pensar en que son
más agrícolas que empresarios. Para ellos existen métodos y procedimientos de
cálculo simples, como el UTA o Unidad Técnica Arada utilizada en Argentina en
aquellas explotaciones que manejan maquinaria propia. El cálculo de la UTA
representa el costo de arar una hectárea, costo que es usado como base para
estimar el costo de otras labores ocupadas en la actividad, expresadas en
términos relativos a la arada. Es una manera de trabajar con estándares
relativos al costo de arar una Ha., y si los componentes del cálculo son
consistentes y validos el algoritmo entrega costos totales bastante aproximados
a los que daría una Contabilidad de Costos formal y organizada.
Cómo funciona el método? Primero se calcula el costo de la arada (UTA), de
la manera convencional y lo más ajustada posible. Luego, este costo se multiplica por el
coeficiente que corresponde a cada labor distinta, por ejemplo rastra,
sembradora, etc. Cada empresario deberá tener su propia tabla de equivalencias
en base a su experiencia propia (lugar, tipo de semilla, tipo de siembra,
clima, etc.), pero también existen listados genéricos que se pueden aplicar
previa una revisión y ajuste a las condiciones propias de cada unidad. El
sistema tiene mucha lógica ya que incluye todas las labores necesarias para
tener 1 Ha disponible para la siembra. Una vez calculados los costos equivalentes
por hora de las maquinas de arrastre, se lo multiplica por el Tiempo Operativo de
cada uno para obtener el costo por Ha. A continuación mostramos una Tabla de equivalencias
mostrada en la Revista Agromercados, de Argentina:
Tabla de
equivalentes arada por Ha.
Arado de rejas 1º.................................... 1.00
Arado de rejas 2º.................................... 0.90
Rastra tiro excéntrico.............................. 0.80
Arado Rastra o múltiple.......................... 0.70
Cincel 1º pasada.................................... 0.90
Cincel 2º pasada.............................. ..... 0.80
Vibro cultivador....................................... 0.40
Rastra doble acción.......................... .... 0.50
Rabasto nivelador (solo)........................ 0.40
Rastra de dientes con rabasto............... 0.25
Rolo........................................................ 0.30
Sembradora............................................ 0.50
Escardillo............................................... 0.45
Rastra rotativa........................................ 0.35
Pulverizador de arrastre......................... 0.30
Desmalezadora...................................... 0.50
Fertilizadora en polvo............................ 0.30
Pala de arrastre (por hora de tractor)....
.0.80
Trenes de herramientas: 100 % UTA primera herramienta + 50 % del implemento
agregado.
Fuente: Revista Agromercados
Que costos entran en el calculo de la UTA? Los que normalmente se incluyen
son combustible, mantenimiento, reparaciones, depreciaciones, intereses, personal
o mano de obra, costo de administración. Un simple calculo de asignación y
sumatoria nos da el costo de arada de la Ha.
Los costos directos no son difíciles de identificar, valuar y apropiar; el
problema está en los costos indirectos o generales, que deben asignarse a la
UTA de manera más o menos arbitraria. Por ejemplo, el caso de las
depreciaciones, en que se consideran como parte del costo de funcionamiento de
la maquinaria si el uso anual del tractor supera el punto de equilibrio del
equipo; caso contrario, formarán parte de los costos fijos de la empresa y no
serán considerados en el calculo del valor de la UTA. En cuanto a la mano de
obra, se considera el costo horario en los casos que el pago al tractorista sea
por hora; si la mano de obra es familiar o de un empleado a sueldo fijo, este gasto
será considerado como costo fijo de la empresa y no como parte del costo de la
UTA.
Las Labores realizadas por contratistas se avalúan a lo efectivamente pagado por ellas; si se paga con productos,
deben valorizarse éstos a su valor neto de mercado. Las semillas se consideran al valor del
total de la semilla sembrada, incluyendo inoculantes, etc. Si la semilla
proviene de la cosecha anterior, se valúa a precio neto del producto en el mes en que se haya
efectuada la siembra; los gastos de clasificación, curado y acondicionamiento
para uso, se agregan al valor de la semilla como costo adicional. Los herbicidas que se aplican al cultivo para el
control de malezas anuales, pre y post siembra, son valuados a precio
de compra. Si son herbicidas
de stock, se valúan a precio de mercado del momento de la aplicación. Los
herbicidas se incluyen en los gastos del cultivo, salvo si se usan en
erradicación de malezas, en que se deberán prorratear entre el cultivo y los
costos fijos. A los insecticidas y fertilizantes se aplicara el mismo criterio que para los herbicidas. En caso de fertilizantes, se
aplica la totalidad de su valor al cultivo.
Los Gastos de Comercialización incluyen todos los gastos entre cosecha
y venta (comisiones, impuestos, fletes, etc.). Los intereses representan el
costo de oportunidad del dinero inmovilizado en la actividad analizada, por el
tiempo transcurrido entre siembra y cosecha. Si los costos de implantación y
protección se solventan con recursos propios, la tasa de interés a considerar será
la posible renta financiera que generaría ese dinero; si los costos se
financian por terceros, se debe usar la tasa de interés del crédito, y si se
financian parte de los gastos se puede utilizar un promedio ponderado de las
tasas de interés correspondientes.
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